Un destino perfecto para viajar
Los Montes Cárpatos y las fronteras con Serbia y Macedonia al oeste, el Río Danubio y la frontera con Rumanía al norte, el Mar Negro al este y las fronteras con Grecia y Turquía al sur son los límites que rodean Bulgaria, un destino situado en la parte oriental de Europa con grandes atractivos que ofrecer a sus visitantes.
Situada al oeste del país, Sofía, la capital, es un excelente punto de partida para comenzar tus viajes a Bulgaria, ya que esta ciudad atesora grandes propuestas de ocio y cultura. La Catedral de Alexander Nevski, uno de los templos ortodoxos más grandes de Europa oriental, es el edificio más emblemático de la capital búlgara. De estilo neobizantino, sus cúpulas doradas forman parte del inconfundible paisaje urbano de la ciudad. Para quienes deseen tomarse un merecido descanso en la capital de Bulgaria, los Baños Centrales constituyen el lugar perfecto para ello. Se trata de un complejo termal construido a principios del siglo XX y que en la actualidad comprende diversas piscinas cubiertas, así como también varias salas de tratamiento corporal. Estos baños se hallan además muy próximos a la Mezquita de Banya Bashi y al Mercado Central de Sofía, lugares que también merece la pena ser visitados.
Otro edificio religioso muy singular de Sofía es la Iglesia de Boyana. Sus frescos constituyen uno de los más bellos ejemplos del arte medieval en la Europa Oriental. A pesar de que sus frescos más antiguos datan del siglo XIII, se hallan en un buen estado de conservación. Otro de los atractivos que cabe señalar de la capital de Bulgaria es su gran conjunto de museos. Uno de los más importantes es el Museo Nacional de Historia, el cual realiza un completo recorrido por los sucesos históricos del país balcánico, desde la Prehistoria hasta el final de la II Guerra Mundial. Para quienes deseen adentrarse más en profundidad en la historia del país balcánico, de visita casi imprescindible resulta el Museo Arqueológico Nacional, que alberga una extraordinaria colección de piezas de la época tracia (el tesoro de Valchitran), griega y romana.
Bulgaria es un destino turístico con grandes atractivos más allá de Sofía. Así por ejemplo, otro de los enclaves más emblemáticos del país balcánico es el Monasterio de Rila. Las coloristas escenas de sus frescos también le valieron el título de lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Una población que forma parte de los recorridos turísticos habituales en los viajes a Bulgaria es Plvdiv, capital cultural del país y considerada por algunos investigadores como la ciudad más antigua del Viejo Continente. Uno de sus monumentos más importantes es el Teatro Romano, que a pesar del transcurrir de los siglos se halla en un buen estado de conservación. Incluso, en la actualidad acoge diversas representaciones escénicas y festivales de teatro. También supone una visita imprescindible en esta ciudad el interesante Museo Etnográfico, sin duda el más importante de esta población búlgara. En su interior se exhibe una colección rica en objetos agrícolas, mobiliario, telas, fotografías o instrumentos musicales.
En la zona central del país, otra interesante población que atrae cada año el interés de los turistas en viajar a este territorio es Veliko Tarnovo. Su pintoresco casco histórico invita a pasear por sus calles repletas de encanto. La ciudad además acoge una atractiva oferta de ocio y cultura, ya que en ella se halla uno de las universidades más grandes del país. Así pues, los viajes a Bulgaria se convertirán en el destino perfecto para disfrutar de la cultura y el patrimonio que atesora Europa del este.