Unos inconfundibles taxis de color amarillo recorren una larga avenida bajo un mar de rascacielos. Seguro que viendo más de una película habéis soñado con estar allí, en la ciudad que nunca duerme. Efectivamente, hablamos de Nueva York. Vuestra luna de miel puede ser la ocasión perfecta para visitar esta asombrosa megaurbe en un viaje en el que, además, podréis disfrutar de las paradisíacas playas del cálido mar Caribe.
Animados musicales y playas de ensueño: combinado Nueva York-Caribe
Cuando Audrey Hepburn lució su mítico vestido negro en Desayuno con diamantes no fueron pocos los que se quedaron prendados no solo de esta bella actriz, sino también de la increíble ciudad en la que se rodó la trama de la película: Nueva York. No podéis perderos sus animados musicales, sus comercios, su amplia oferta de ocio y restauración…
Pero la considerada capital del mundo cuenta con muchos más alicientes. Y uno de ellos son las magníficas vistas que ofrecen las azoteas de lugares tan emblemáticos como la Estatua de la Libertad o el rascacielos del Empire State. Por la noche, las luces de neón iluminan la animada vida de Times Square, uno de los centros neurálgicos de la cosmopolita Nueva York cuya visita es más que recomendable.
Además de unos días inolvidables en esta ciudad estadounidense, podéis completar vuestra luna de miel con una romántica y relajante estancia en las paradisíacas costas de la Riviera Maya, en el Caribe mexicano. Allí os esperan playas de una finísima arena blanquecina y unas aguas de un intenso color azul turquesa. Sin duda el complemento perfecto para disfrutar de una luna de miel repleta de instantes eternos.
La Riviera Maya, en la mexicana península del Yucatán, no sólo es famosa por la idílica estampa que presentan sus playas. También lo es por el fabuloso patrimonio histórico que alberga. Situadas entre dos ciudades cuyo nombre sin duda os sonará (Mérida y Valladolid), las pirámides mayas de Chichén Itzá os permitirán adentraros en todos los secretos de esta enigmática civilización precolombina.
En vuestra luna de miel Nueva York-Caribe no podéis perderos...
- Practicar deportes acuáticos en la Riviera Maya: las cristalinas aguas de estas costas, con sus bellos fondos marinos repletos de coloridas especies, son perfectas para la práctica del buceo, el snorkel y otros deportes acuáticos.
- Misa Gospel: en el barrio de Harlem podréis asistir a este tipo de celebraciones que destacan por la vistosidad y el animado ritmo que imprime el coro.
- Paseo en helicóptero a través de los rascacielos: una forma diferente de admirar el skyline de Nueva York es hacerlo desde un helicóptero. Son varias las empresas que ofrecen vuelos sobre la isla de Manhattan. ¡Toda una experiencia realmente inolvidable que merece la pena vivir al menos una vez en la vida!
- Asistir a un musical en Broadway: la cartelera de musicales de Nueva York es posiblemente la más amplia, variada y exitosa del mundo. Títulos clásicos de la gran pantalla, y otros propios del género, os esperan en Broadway con una increíble puesta en escena que os asombrará desde el mismo instante en el que se alce el telón.
- Disfrutar de una hamburguesa en una cena-espectáculo: podréis disfrutar de una magnífica hamburguesa en uno de los múltiples locales neoyorkinos que ofrecen cenas-espectáculo con música y actuaciones en vivo.