Si hay una ciudad conocida por sus pubs esa es Dublín, la capital de Irlanda. Este hermoso lugar da la bienvenida a sus visitantes con una cerveza y una amplia variedad de lugares y rincones por descubrir. Caminar por sus calles es la forma ideal de sumergirse en todo lo que esta capital irlandesa tiene para ofrecer. Recorrer áreas como Temple Bar es sumergirse en la historia de uno de los barrios más antiguos de Dublín, disfrutando de una cerveza en alguno de los numerosos pubs que adornan sus esquinas. La ciudad invita a explorar sus calles, desde la animada O’Connell Street, repleta de gente, tiendas y monumentos, hasta la más serena Grafton Srteet. Buscar hoteles en Dublín es el comienzo de una aventura emocionante.
La ciudad de los pubs
Visitar Dublín es recorrer cada rincón de la ciudad y conocer todos sus pubs donde divertirse con la música y el ambiente irlandés. Es un lugar social, repleto de cultura y creatividad. Fuera de la ciudad podrás disfrutar de paseos por la costa, pueblos pequeños y paisajes montañosos. Los hoteles de Dublín ofrecen impresionantes servicios y vistas increíbles.
Uno de los puntos más turísticos es el Trinity College y su famosa biblioteca. Se trata de la universidad más antigua del país, fundada en 1592 por la reina Isabel I. La universidad se encuentra ubicada en el centro de la ciudad y es de visita obligatoria. La famosa catedral de San Patricio es otro de los puntos más concurridos por el turista. Este edificio es de estilo gótico y cuenta con uno de los órganos más grandes de Irlanda. Alojarse en Dublín es conocer su magnífica historia. El Castillo e Dublín es otro de los sitios que el viaje no debe perderte en su recorrido si quiere descubrir los tesoros que ofrece la ciudad.
Para disfrutar del ambiente y de sus pubs, Grafton Street, está repleta de edificios históricos y locales. Además, aquí se encuentra la cafetería Bewleys Oriental café de las más antiguas de la ciudad. No dejes la oportunidad de tomarte un buen desayuno irlandés en este local. Además, las calles adoquinadas de Temple Bar, están repletas de pubs, no puedes irte sin probar su mítica cerveza Guinness u otras cervezas artesanales. En este lugar se conoce a personas de todo el mundo disfrutando de la noche y de la vida nocturna. Hospedarse en Dublín también es disfrutar y descansar sin la necesidad de llevar un ritmo ajetreado.
La gastronomía de Irlanda destaca por el estofado irlandés, el pastel de patatas boxty, la morcilla negra y blanca, el coodle y sus psice bag, uno de los platos de comida rápida más populares del país. Gracias a la tradición pesquera, el país tiene muy buen producto de marisco y pescado. La mejor zona para probar su delicioso pescado es la costa sur y oeste. El pastel de barmback, está realizado por pan y pasas, un dulce que no debes perderte.
Dublín es muy conocida por su hospitalidad. Los dublineses son conocidos por su amabilidad y buen humor, siempre dispuestos a compartir una historia o llevar a los visitantes a descubrir los rincones más encantadores de la ciudad. Esta calidez humana, combinada con la riqueza cultural y la belleza natural de sus alrededores, hace de Dublín un destino inolvidable.
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