Si algo tiene Europa es mucha historia, y eso es algo que podemos comprobar en casi la totalidad de los pueblos y ciudades de todo el continente. Sin embargo y aunque son muchísimas las capitales tremendamente bellas y con edificios realmente monumentales, hay que irse hasta los pueblecitos europeos más escondidos para encontrar esos rincones realmente seductores que atrapan y enamoran a todo viajero que pasa por sus calles.
Precisamente por eso, y para ubicar en el mapa algunos de esos pueblos mágicos que se esconden por la geografía del continente europeo, hoy viajamos hacia 10 destinos de cuento de hadas que bien podrían haber salido en una película Disney o de esas historias mágicas con los que crecimos cuando éramos tan solo unos niños. ¿Quieres descubrir los pueblos más bellos de Europa?
San Gimignano, Italia
Si La Toscana es una de las regiones más bonitas de Italia, San Gimignano es uno de los pueblos más bellos de toda la península italiana. De origen medieval, se trata de un pueblo amurallado en lo alto de las Colinas de la Toscana. Su fama viene sobre todo por sus torres, y es que en tiempos antiguos, las familias más adineradas competían entre sí por la construcción de las torres más altas. Originariamente existían 72, aunque hoy en día solo se conservan 15, y es que se trataba de la versión medieval de lo que hoy en día es Nueva York. Disfruta de un viaje a La Toscana u otras regiones de Italia y descubre el inmenso patrimonio histórico del país.
Carcassonne, Francia
Se trata de la capital de la comuna de Aude y es famosa por su ciudad amurallada y un conjunto arquitectónico medieval que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Su espectacular castillo del siglo XII traslada a los turistas a una época de caballeros y nobles. Un escenario típico de películas de época y que sin duda forma parte de uno de los mejores conjuntos medievales mejor conservados y más bonitos de todo el mundo. Aprovecha y descubre el sur de Francia en tus próximas vacaciones, ¡no te arrepentirás!
Castle Combe, Inglaterra
Dicen de él que es el pueblo más bonito de toda Inglaterra, pero… ¿por qué? Seguramente porque pasear por sus calles es como caminar por las películas que recuerdan aquellos siglos donde las casitas bajas acompañadas de flores y otras plantas, se fusionaban con la naturaleza sin romper su armonía. Además, cuenta con un mercado medieval del siglo XIV.
Tossa del Mar, España
Este es uno de esos pueblos donde parece haberse detenido el tiempo. Pero sin duda además del encanto que el propio paso del tiempo le ha concedido a este pueblecito catalán, su ubicación frente a una costa preciosa y de colores azules intensos ha ayudado mucho a convertir a Tossa del Mar en uno de los pueblos de postal más bonitos de toda España. El centro histórico consta de un castillo, casas centenarias de piedra y una muralla que protegía a los habitantes de los ataques de piratas y otros delincuentes.
Cochem, Alemania
Se trata de un pueblo situado en un valle alemán en cuyo centro se encuentra sobre una colina un castillo del año 1051. Se trata de la fortaleza Reichsburg, que aunque fue destruido durante una invasión, años después fue reconstruido. Además, en el casco antiguo del pueblo que rodea el castillo, se pueden visitar los restos de la muralla y su entrada, el histórico molino de mostaza, el ayuntamiento barroco y callejear pos sus estrechas y sinuosas calles. ¡Una auténtica gozada! ¿Te vas a resistir a hacer una escapada a Alemania?
Kilkenny, Irlanda
Este pequeño rincón irlandés es sin duda uno de los destinos más peculiares. Además de ser un pueblecito medieval lleno de encanto, también es la localidad más pequeña de Irlanda. Kilkenny, que también es conocido como “la ciudad del mármol”, es uno de los destinos turísticos por excelencia. Su típica arquitectura normanda y una historia medieval completamente fascinante, han hecho de este pueblo irlandés uno de los destinos turísticos estrella y más conocidos del país.
Berna, Suiza
Suiza no podía faltar en este ranking de pueblos del medievo. Su representante es Berna, capital del país y situada en un marco que podría parecer que ha sido hecho con efectos especiales. Su irradiante naturaleza y con los Alpes de fondo, son solo uno de los aspectos destacados de una capital que esconde un casco histórico realmente apasionante.
Disfruta de una escapada por Suiza y descubre los mercadillos navideños, pueblos con encanto y magia propia. ¿Te animas?
Tallín, Estonia
Es la capital del país y una de las más desconocidas de toda Europa. Con torres medievales en su centro histórico, Tallín esconde una ciudad medieval entre sus calles de tal relevancia que ha sido declarada Patrimonio Histórico de la Humanidad por la UNESCO. Su panorámica es sencillamente espectacular, y es que desde lo alto se pueden vislumbrar infinidad de torres y tejados más o menos puntiagudos entre los que se esconden callejuelas estrechas y románticas, típicas de los cuentos de hadas.
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Krems, Austria
Muchas ciudades y pueblos crecieron a orillas de importantes ríos. Este es el caso de Krems y el Danubio, uno de los grandes ríos europeos. Esta pequeña población austriaca es una auténtica maravilla. No solo por el estado de conservación de sus calles y edificios, sino por el propio entorno y sincronía que parece existir entre el pueblo y la naturaleza. La imagen de Krems al otro lado del río es verdaderamente impresionante, sobre todo si los campos están verdes tras la época de lluvias. Un destino ideal al igual que otros muchos para una escapada por Europa, ¿no crees?
Óbidos, Portugal
Se trata de un pueblo situado a poco más de 80 kilómetros al norte de Lisboa. Tanto su castillo como muralla están increíblemente conservados y se sitúan en lo alto de una colina que ofrece unas vistas realmente espectaculares. Pero además del conjunto medieval, también se puede visitar el pueblo, que con sus paredes decoradas con azulejos típicos de la zona, líneas de colores (azules, verdes y amarillos) y las flores en la ventana, han convertido a este rincón portugués en uno de los pueblos con más encanto del país.
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